La música es un arte, y quien diga lo contrario miente. Así de simple. Existen muy pocas cosas en el mundo que te hagan sentir lo que te hace sentir la música. Una serie de sonidos, melodiosos o no, en armonía o no, unidos de tal manera que supongan algo placentero para tu cerebro. Y a eso súmale las letras que cuentan historias, o hablan sobre temas que te pueden afectar de una forma u otra.
Personalmente, no soy una de las personas que más sepan de música, ni que tenga un oído exiquisito ni nada por el estilo (de hecho tengo muchísimo que aprender, y me falta MUCHA música que escuchar), pero puedo suponer que tengo un gusto musical lo suficientmente regular dentro de lo bueno como para dar una opinión ciertamente objetiva.
Pues bien, vengo a defender a la música. Y por desgracia, sí, por desgracia, a defenderla aunque la haga Justin Bieber, Pitbull, Metallica, Queen, Daddy Yankee, Pink Floyd, Skrillex, Deadmau5, Led Zeppelin, Deep Purple, Blink-182, los Sex Pistols, los Beatles, MXPX o Tacabro. La música puede tener calidades, sí, pero por dios, sigue siendo música y sigue siendo subjetiva, así que critica la calidad, pero siempre, siempre, con algún tipo de experiencia. No digas que la electrónica es una mierda sin haber escuchado más que dos canciones o que los Jonas Brothers son malísimos sin haber más que oído hablar de ellos (en este apartado, demuestro una cierta hipocresía, ya que he escuchado bien poco de ambos ídolos juveniles mencionados anteriorente, pero no tengo ganas).
También se ha de añadir que no se pueden tener prejuicios por el tipo de música que se escucha. No tienes que ser un perroflauta si escuchas ska, un heavy si escuchas mötorhead, o un cani si escuchas camela. De hecho, me jacto de escuchar muchos tipos de música diferentes, desde el pop hasta el reggae. Entonces, ¿qué soy? ¿Un punky? ¿Un macarra? ¿Un moñas? ¿Una aberración de la raza humana? No, soy una persona, al igual que los demás, así que juzguemos la gente por cómo son, no por lo que escuchan.
Creo haber dejado clara mi postura respecto a la música, que para millones de personas deja de ser algo que existe a ser un estilo de vida, con los problemas, las alegrías, las extrañeces y el sentimiento que ello conlleva. Seguramente habré demostrado mi incultura en multitud de ocasiones en unas pocas líneas, pero para eso ya tenéis el apartado de comentarios de ahí abajo.
Para los pocos que lean.
Como dato, estoy escuchando Dead memories de Slipknot a la que escribo esto.
Gracias, escasos lectores
Ruly Pufcomiquero
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